Uno de los pecados más comunes en bolsa es la impaciencia, queremos que nuestros valores suban todos los días y frecuentemente dudamos de ellos por ver que otros ganan altura con mayor velocidad, pero en bolsa no se puede subir todos los días ni siempre igual de rápido, ni siquiera por que la caída previa sea...
muy brusca, siguiendo esta idea la evolución del Santander en las últimas tres semanas (marcado con un rectángulo rojo) encaja perfectamente con una consolidación lateral.
Pero es importante no confundir la impaciencia con la necedad, debemos saber diferenciar la perdida de velocidad o incluso un periodo de consolidación con una perdida de momento alcista, por eso es tan importante tener un plan establecido y saber las perdidas que somos capaces de asumir, en bolsa se debe operar con frialdad pues esa es una de las claves del éxito. A corto plazo el Santander perdería momento alcista con la vulneración de los 6,30 euros, por tanto si ese es nuestro estilo de operativa un cierre bajo 6,30 euros debería bastar para cerrar posiciones y ejecutar un stop profit.
Si por el contrario preferimos la operativa a medio plazo hay que ser conscientes de que la vulneración de los 6,30 euros haría que el Santander perdiera momento a corto pero no a medio plazo, si somos capaces de soportar un ajuste mayor, que podría ir incluso (aunque no creo) hasta el origen de la subida en la zona de 5,80 euros, podríamos mantener las acciones aunque caigan los 6,30.
La otra cara de la moneda es conocer cuando volverá a ganar momento alcista a corto y medio plazo el Santander, esa respuesta es sencilla, por encima de 6,60 euros deberíamos vivir un nuevo tramo de subida pues además, parece muy probable que coincidiera con la ruptura del Ibex de la resistencia de 11.200 puntos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario