Personalmente soy de los que piensan que el potencial alcista de Wall Street puede estar agotado aunque quizá la continúa apreciación del Dolar pueda ofrecer rentabilidad a los inversores europeos en un entorno de lateralidad, en cualquier caso eso supone asumir un doble riesgo con el que no deberíamos lidiar teniendo en cuenta que a priori, el mayor potencial alcista puede estar...
en las bolsas europeas, donde el DAX 30 y el Eurostoxx 50 (ver gráfico) vienen dando durante estos últimos días señales de solidez, de ruptura alcista y de confirmación de pautas potencialmente alcistas.
Por desgracia, una vez más, el Ibex 35 se ha quedado atrás, y como no los grandes culpables han sido de nuevo los bancos. Los pequeños, salvo contadas y puntuales excepciones como Sabadell ahora o Bankinter en su momento, batallan duramente por mantener soportes importantes, aferrándose en el caso de Bankia o Popular (ver gráfico) a soportes decrecientes que ofrecen a sus inversores la posibilidad de creer todavía en una vuelta alcista, todo mientras otros valores logran encadenar un máximo detrás de otro. Por su parte los dos grandes bancos no lo hacen mucho mejor, el Santander se muestra débil desde la ampliación de la Sra. Botín y el BBVA (ver gráfico) parece fracasar en su tentativa de ruptura alcista, hasta que se calmen los ánimos en Grecia la alegría no volverá al sector bancario.
Con respecto al Ibex 35 mi pensamiento no ha variado un ápice en las últimas semanas/meses, soy alcista a largo plazo aunque a corto el índice pueda seguir sufriendo la incertidumbre griega. Hace meses ya os presentaba el gráfico con la figura de hombro cabeza hombro invertido en zona de mínimos, ya confirmada con la ruptura de los 8.500 puntos, y hoy os presento otra de mayor tamaño que parece estar acabando de formarse que se confirmaría con la ruptura de los 11.200 puntos por donde pasa la linea clavicular del hchi, podéis verlo en el segundo de los gráficos.
A corto plazo nuestro índice sigue presentando dudas, cuando parecía que la ruptura de los 10.500 puntos iba a proporcionarle un salto de calidad, han llegado las dudas al alcanzar el hueco de ruptura bajista que el índice se dejó entre 10.800 y 10.700 puntos. El Ibex se ha pasado toda la semana cruzando la media móvil de 200 sesiones hacia arriba y hacia abajo en un síntoma evidente de la indecisión, la que genera tener en cada lado de la balanza una importante noticia que solo difieren en su sesgo, alcista la QE y bajista el problema de la deuda griega. Al final el lado que más pese en la balanza es el que marcará la evolución de las bolsas a corto plazo, a largo con los tipos de interés rondando el 0 % las bolsas no les quedará otra que subir.
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