Llevamos semanas a vueltas con el Ibex 35 dando algunos bandazos puntuales pero con una única y clara evidencia si nos ceñimos al gráfico, la lateralidad; una lateralidad que podemos delimitar de diversas maneras, con un soporte zonal y otro lineal como podéis ver en el gráfico superior o simplificar a la mínima expresión, el Ibex seguirá siendo lateral...
mientras no sea capaz de superar los 8.230 puntos o pierda los 7.500, la importancia de lo demás es secundaria.
Y si algo sabemos de los rangos laterales es que estos son imprevisibles tanto en el tiempo de duración como en la dirección de la ruptura, sobre la primera aseveración destacar que si suele aceptarse que la ruptura será más violenta cuanto mayor sea el periodo en que permanezcamos laterales; sobre la segunda destacar que normalmente las rupturas tienen una mayor probabilidad de producirse en la dirección de la tendencia, pero en este caso estamos vendidos, la tendencia principal, si queremos de largo plazo, es bajista, por su parte la tendencia de corto plazo (o el tramo anterior de medio plazo al actual) ha sido alcista, tablas y por tanto incertidumbre. Personalmente tengo la impresión de que la probabilidad de ruptura alcista es mayor, pero la mera intuición en bolsa no suele bastar para posicionarse, en cualquier caso creo que si el 5 de Enero no hemos roto al alza tras aprovechar el rally de navidad ya no lo haremos y será prudente reducir posiciones, pero por desgracia esto también es una suposición sin base analítica.
Evidentemente un Ibex lateral no implica que todos sus valores y sectores estén laterales, muy al contrario, incluso entre los pesos pesados encontramos sensibles diferencias, basten como ejemplo los dos mayores valores del índice por ponderación bursatil, Telefónica al borde de perder el soporte clave de 9,80 euros e Inditex otra vez por encima de 100 euros.
Esperemos que los Reyes Magos traigan a los inversores la ruptura alcista del rango lateral, porque si viene carbón...
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